UNAS PRECIOSAS PALABRAS DE UNA ABUELA

“Jacquelinita, te escribo desde mi corazón, que dicen que está un poco débil. Sabes que entre nosotras nunca han hecho falta las palabras. La vida te llevó lejos de mi, pero Dios no dejó que te alejaras de mi alma ni un minuto en todos estos años. Solo tengo pensamientos de agradecimiento, aunque la vida no ha sido fácil, el amor de mis hijas y de mis nietos me ha compensado con creces cualquier sufrimiento del pasado y yo ahora solo vivo el presente y en mi presente estás tu y ese hijo que está por llegar y que ruego a Dios me permita conocer, pero si no es así, desde donde esté, yo seré su ángel de la guarda, estaré siempre que lo necesite, ten la seguridad que lo estaré arrullando con mi amor. Recuerda, sigue tu corazón y disfruta de cada momento de felicidad por pequeño que sea, y sigue dándote como lo has hecho hasta ahora, no importa que quizás lo que des no se valore, lo importante es sentir que eres capaz de amar. Sabes que hay un Amor Universal y que todos somos parte de él, de un todo, por eso no sientas pena si me tengo que ir, estoy en tu pasado, en tus recuerdos, en tu sangre, sigue luchando por tus sueños como hasta ahora, recuerda que lo único que duele es aquello que no se ha hecho con amor y con valor. El miedo es solo un pensamiento negativo y nosotros no tenemos espacio para ello. Perdona siempre porque el perdón te hará libre. La única verdad es el amor que eres capaz de dar. Siempre que camines por el camino del amor me encontrarás. “